En 1964 en Llerena se comenzaron a realizar una serie de obras en la Plaza Mayor y en la iglesia de Nuestra Señora de Granada, con el fin de poder localizar los restos de una antigua mezquita andalusí y su alminar.
En una primera fase, las obras se llevaron a cabo en la plaza, hallándose una gran cantidad de restos humanos, hallazgo que atribuyeron al traslado de cuerpos de un antiguo cementerio aledaño a la iglesia.
Unos días más tarde los trabajos se extendieron a la iglesia y sobre todo a su torre, construida entre los siglos XIII y XIV, al frente de la investigación se encontraba el notario local Antonio Carrasco, la investigación hacia presuponer que la mezquita se podía localizar en el interior de la torre del templo.
Cierto día, estando trabajando los obreros en las labores de investigación se toparon con un muro que parecía cegar una zona muerta, Carrasco ordenó derribar la pared, al echarla abajo, encontraron oculta una antigua escalera muy empinada que desembocaba en una deteriorada puerta.
Se tomó la decisión de abrir la puerta, en el momento de hacerlo notaron como algo ofrecía una gran resistencia desde la parte de dentro, por lo que, con mucho esfuerzo pudieron abrir el espacio justo para que pasara una persona
Nada más entrar quedaron perplejos, antes ellos se encontraba una enorme cantidad de cadáveres, algunos de ellos estaban momificados. Gran parte de los cuerpos presentaban una posición extraña con gestos de horror en sus rostros, daba la sensación de que debían haber padecido una muerte marcada por un gran sufrimiento.
A pesar de lo extraño del hallazgo y sin que hubiese investigación alguna, la entrada del habitáculo volvió a taparse, como si no quisieran conocer lo que allí realmente ocurrió. Exceptuando unos primeros días de rumores por el pueblo, el tema cayó rápidamente en el olvido.
Tuvieron que pasar 15 años para que los restos volvieran a ver la luz, fue en julio de 1979, una época en que la Dirección General de Bellas Artes pretendía poner en valor el rico patrimonio histórico español, por lo que se produjeron obras de restauración en la iglesia, y volvieron a aparecer los cadáveres que años atrás habían sido ocultados, rápidamente se formó un gran revuelo tanto en Llerena como a nivel nacional, la gente se preguntaba que hacían tal cantidad de cuerpos allí escondidos.
Y comenzaron a surgir hipótesis de todo tipo:
·Unos hablaban de que los crímenes podrían corresponder a Autos de Fe llevados a cabo por el Tribunal de la Santa Inquisición de Llerena contra miembros de la secta de Los Iluminados ó Alumbrados (saber mas sobre los iluminados)
·Otros pensaban que los cadáveres podrían pertenecer a crímenes realizados durante la Guerra Civil
·Y casi todos opinaban que los rostros desencajados reflejaban el sufrimiento de unas personas que habrían sido emparedadas en vida.
Tras el hallazgo se requirió la presencia de expertos antropólogos para estudiar el caso y técnicos de universidades de Madrid y Barcelona llegaron para intentar aclarar los hechos. Se contabilizaron unos 6.000 cadáveres de los cuales al menos cuarenta se encontraban momificados.
Las conclusiones de los especialistas coincidieron al indicar que se trataba del enterramiento más importante descubierto en España en la época contemporánea y que los restos más recientes databan del siglo XVIII,
·Además, según el departamento de Antropología de la Universidad Complutense de Madrid, los cadáveres presentaban violentas fracturas y algunos tenían el cráneo aplastado, otros habían padecido enfermedades y anomalías físicas.
·El departamento de Antropología de la Universidad de Barcelona, basándose en el análisis de los cuerpos y en la posición que adoptaban, llegó a la conclusión de que podría tratarse de un emparedamiento en vida.
Tras las opiniones de los especialistas creo que existen algunos puntos claros:
Al fechar los restos mas recientes en el siglo XVIII podríamos descartar que se tratase de víctimas de la guerra civil
Sobre los que pensaban que podría ser obra de la Inquisición, gran parte de los castigos del Santo Oficio están documentados y parece ser que en ningún caso utilizaban la técnica del emparedamiento para dar muerte a los infieles.
Realmente el hecho de que aparezcan restos humanos en una iglesia medieval no es algo extraño, pues antes la gente se enterraba en los templos y los alrededores de éste, no es hasta el siglo XIX cuando los camposantos salen de las poblaciones por motivos de higiene.
A pesar de que puedan existir algunos puntos claros, tras más de cincuenta años, el misterio sigue sin resolverse y aún a día de hoy en pleno siglo XXI continuamos barajando varias hipótesis:
· El investigador extremeño Gonzalo Pérez Sarró siempre creyó que se podría tratar de un emparedamiento colectivo, por el extraño color grisáceo que presentaban los cuerpos, fruto del proceso de saponificación: la grasa corporal se transforma químicamente en una masa de color gris y de tacto granuloso y compacto.
· Algunos especialistas siguen pensando que se podría haber ido produciendo un continuo depósito de cadáveres durante un largo período de tiempo, que podría abarcar entre cuatro y cinco siglos
· Otra hipótesis habla de que debido a una epidemia una gran cantidad de gente habría fallecido y fueron encerrados y aislados todos los cuerpos juntos.
· Se comenta también que los cuerpos podrían haber sido trasladados desde algún cementerio cercano y hacinados en ese habitáculo.
No obstante me siguen viniendo una gran cantidad de preguntas a la cabeza:
· ¿Por qué fueron encerradas en la torre de la iglesia?
· ¿A qué se deben las fracturas y por que tienen esos rostros de horror?
· ¿Quiénes eran estas personas?
· ¿Quiénes fueron los responsables?
· ¿Por qué algunos cuerpos se encontraban momificados?
Sin duda esta historia ha dado lugar a una gran cantidad de especulaciones, como los ajusticiamientos o enterramientos en vida, quizá muchas de ellas sean fruto de nuestras fantasías.
Tras la finalización de la investigación, muchos de los cadáveres fueron sepultados bajo la iglesia, otros en una fosa común y el resto se dejaron en el habitáculo donde se encontraron, cerrando de nuevo su entrada.
8 Comentarios
lo vivi muy de cerca en esa fecha era primer teniente de alcalde de Llerena
Mi padre me contó esta historia cuando yo era muy pequeña. Él lo vivió cuando era un niño. Me dijo que había mujeres con bebés en brazos...creo que de aquí viene su animadversión por la iglesia...
https://www.youtube.com/watch?v=iJ-kj92Htt0 https://www.youtube.com/watch?v=bsEt-X71QzA
Mi padre me comentó que eso ya se descubrió mucho antes y les dijeron que callaran el era el Agüero de la Brigada de obras nació en el 1942 y falleció en el 2000 los viejos del pueblo saben más y de otras fosas que hay en el pueblo
Està ha Sido una matanza de musulmanes, justo ha pasado cuando se decretó que no habrá más inquisición. A los partidarios de esta, provocaron esta matanza y enterraron los cadaveres. No puede ser víctimas del franquismo por razones obvias.
En la época a la que corresponden los cadáveres no hubo ninguna persecución de musulmanes en España. Además, si se hubiera tratado de cadáveres de musulmanes, jamás hubieran sido inhumados en una iglesia. Señor Mustafa, por favor, infórmese antes de decir cosas sin sentido.
Me encuentro buscando un caso ovni ocurrido en la provincia de Cáceres el 18/10/1995 y me he encontrado con los comentarios sobre este artículo. Por este tipo de cosas tengo aborrecido el misterio: ¿muerte de musulmanes? ¿animadversión por la iglesia? Conozco un convento donde los muertos por peste se echaban a través de la ventana de sótano y quedaban enterrados allí y lo mismo pasaba en un castillo abandonado, al que se llevaba a la gente enferma para que sanara... o que se muriera. La peste se ha cargado a un montón de personas desde la Edad Media y recuerdo, si la memoria no me falla, que hasta el s.XIX no se promulgó que los cementerios estuvieran fuera de los pueblos, enterrándose hasta entonces en las iglesias.
Navaja de Ockam: la Iglesia no consentía el enterramiento en terreno sagrado de cuerpos de relajados o no cristianos; el número de cadáveres es muy superior al número de los iluminados de llerena; los gestos de dolor o sufrimiento de los cadáveres sólo son debidos a las tiranteces de la desecación de los tejidos; las fracturas observadas son post mortem debidas a los manejos de las osamentas que, se sabe, se vuelven muy frágiles tras la desecación; el color grisáceo es debido a la cerificación de las grasas; la conclusión a la que podemos llegar es que los huesos los hayan arrumbado, procedentes de enterramientos abandonados para otros usos. Normalmente la explicación más sencilla suele ser la acertada.